El niño que vive en ti
Cuando un bebé nace está rodeado de personas que van a influir en el. Para bien o para mal, aprenderá una forma de ver la vida que le marcará para siempre.
De esa crianza dependerá que tan feliz o infeliz pueda ser. Si al menos tuvo cerca una persona que le transmitió algo de su alegría, es probable que pueda en algún momento disfrutar más de su propia vida.
Sin embargo, a veces las experiencias más difíciles afectan tanto a ese pequeño niño, que crece desconfiado. Le cuesta trabajo relajarse y hasta sonreír.
Y entonces ya como adulto pareciera que ese niño espontaneo y tierno, ha desaparecido.
Pero ¿es que ese niño desaparece o no ha existido? No. Definitivamente todos los seres humanos alguna vez fuimos niños pequeños.
El reto está en lograr recuperar esa infancia para nosotros. El niño que necesita de tanto amor para sentirse seguro, aceptado y amado, está allí escondido detrás de nuestros miedos y recuerdos dolorosos.
Para poder rescatar a esa parte tan bella, espontánea y en estado de gracia, necesitamos mirarnos con sumo amor, dejando atrás las experiencias dolorosas, comenzando a cuidar bien y con ternura de esas partes internas asociadas a la infancia. Capacidad para soñar, creer en la bondad humana, conectarse con la naturaleza, con los animales. Atrevernos a abrazar, atrevernos a abrir nuestro corazón.
Lo más importante es aceptar que el pasado, por malo que haya parecido, ya no existe. Debemos evitar volver atrás, manejar nuestra mente y soltar ese pasado, para darle a nuestro niño una oportunidad de existir.
Si, existir a nuestro lado. Toma de la mano a tu niño interior desde el adulto que hoy eres.
Llévalo contigo cuando viajes, cuando veas una película, cuando vayas al cine, o comas algo dulce…piensa en esto. No estarás nunca solo si llevas a tu pequeño contigo, a partir de ahora.
Por cierto, ¿Cuál recuerdo de tu niñez te llena hoy de alegría?
Y la segunda pregunta ¿Qué harás por tu niño interior? ¿A dónde lo llevarás?
Te invitamos a compartir este tema. Por cierto, ¡Feliz día del niño!